Pese a que en estos días, en donde la sostenibilidad está primando en todos los aspectos y el motor no iba a ser menos, cada vez vamos encontrando más vehículos con sistemas de propulsión eléctrica, gas, híbridos, que tratan de reducir las emisiones de los carburantes.
Sin embargo, antes de la llegada de estas nuevas tecnologías, podríamos encontrar únicamente motores de
gasolina y motores diésel. Y es en estos segundos dónde nos vamos a centrar.
A finales de los años 90, concretamente en 1997, la marca italiana Fiat inicializó algo que hoy en día utilizan la mayor parte de los motores diésel, y no fue otra solución tecnológica que el common-rail.
Esta combustión no puede producirse de cualquier manera y tiene que ser eficiente para que el vehículo pueda rodar más y mejor, de modo que se realiza de tal manera que el carburante se pulveriza por los inyectores para que se queme la mayor cantidad de este. Y de eso se encarga el sistema common-rail.
Qué es el common-rail
Por tanto, podemos definir a esta tecnología como aquella que tiene como objetivo la atomización del combustible, de manera muy superior a la que ofrecen los sistemas de inyección tradicionales.
Con esto se consigue que el proceso de combustión sea mucho más espontáneo a la hora de comprimir la mezcla en los motores diésel.
Para explicarlo de una manera práctica, podemos pasarlo en cuatro puntos. En primer lugar, el combustible se almacena a una presión baja en el depósito. Después, mediante una bomba, el combustible es aspirado desde el depósito a otra bomba, y es aquí donde empieza el tercer paso. Esta segunda bomba es de alta presión y lo envía así al propio sistema common-rail para que finalmente los inyectores puedan pulverizar como una mayor facilidad el combustible dentro del cilindro y la mezcla sea mucho más eficiente.
Actualmente podemos identificar un coche que equipe este sistema de manera rápida, ya que solo nos tendremos que fijar en sus siglas. Por ejemplo, CRDI, CDI, TDCI, HDI…, que no dejan de ser otras denominaciones con las que juegan los fabricantes, pero que se basan en la original de Fiat del año 97.