En un reciente estudio titulado “Efectos de la iluminación deficiente en la siniestralidad vial”, realizado por la Fundación Española para la Seguridad Vial (FESVIAL) y LUMILEDS (Philips), se destaca la importancia crucial de una buena iluminación en la prevención de accidentes de tráfico.
Esta investigación, que ha analizado los accidentes viales de los últimos cinco años (2017-2021) registrados por la
Dirección General de Tráfico (DGT), enfoca su atención en los
siniestros relacionados con una iluminación deficiente, tanto del vehículo como del entorno.
El estudio revela que
uno de cada tres accidentes de tráfico ocurre bajo condiciones de visibilidad limitada o iluminación deficiente, representando el
36,6% del total. Es notable el aumento de accidentes mortales debido a no utilizar el alumbrado reglamentario, que ha crecido del 1,7% en 2017 al 6,4% en 2021. Además, se observa una
tendencia creciente en los accidentes causados por circular sin luz o deslumbrando a otros conductores.
De izquierda a derecha, Ramón Casas (Cetraa), Ana Ávila (Conepa), Ana Belén Martín (Lumileds-Philips), Guillermo Magaz (Aeca-ITV) y José Ignacio Lijarcio (Fesvial).
La investigación también pone de manifiesto que los accidentes más graves ocurren cuando no se utiliza el alumbrado reglamentario o se circula sin luz. En estas circunstancias, la gravedad de los siniestros es más del doble que en otros accidentes. Por otro lado, se ha observado que en condiciones de meteorología adversa, aunque los accidentes son menos mortales, probablemente debido a un mayor nivel de alerta de los conductores.
Otro hallazgo interesante del estudio es que los accidentes en vías urbanas son más frecuentes y graves que en las interurbanas, especialmente aquellos causados por iluminación artificial y meteorología adversa. En cuanto a los tipos de vehículos, los patinetes y bicicletas son los más implicados en accidentes urbanos por no usar alumbrado reglamentario, mientras que los turismos están más involucrados en siniestros con visibilidad restringida.
Los peatones son particularmente vulnerables en estos siniestros, siendo los más afectados en términos de letalidad. Además, el estudio señala que los conductores más jóvenes y los hombres están más implicados en la mayoría de los accidentes relacionados con una iluminación deficiente.
Frente a esta situación, FESVIAL y LUMILEDS han propuesto un conjunto de recomendaciones y compromisos para mejorar la situación. Estas incluyen inspecciones visuales periódicas de los sistemas de iluminación, el uso de lámparas homologadas, la promoción de campañas de sensibilización y la implicación de diferentes actores, como autoescuelas, talleres y la Dirección General de Tráfico, para promover una mejor iluminación en los vehículos y, por ende, una mayor seguridad vial.
En este contexto, la red de talleres Nubecar se posiciona como un aliado fundamental para los conductores. Nubecar ofrece servicios especializados en el mantenimiento y revisión del sistema de iluminación de vehículos, asegurando que cada coche no solo cumpla con las normativas vigentes, sino que también contribuya a una conducción más segura para todos.
Recuerde, una buena iluminación no solo mejora la visibilidad en la carretera, sino que también es un elemento crucial para prevenir accidentes y salvar vidas.
.jpg "La visibilidad limitada o la iluminación deficiente son causas en un tercio de los accidentes de tráfico")
