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Uno de los principales activos de la seguridad de tu coche es el sistema de suspensión. Una mala suspensión puede hacerte salir de la vía. Desde la red de talleres Nubecar te vamos a dar unos consejos para que tu amortiguador no sufra demasiado.
Su principal función es absorber las irregularidades del terreno, mantener el contacto entre vehículo y suelo y garantizar la comodidad de los ocupantes. En líneas generales, el sistema de suspensión está compuesto por dos partes: un elemento que absorbe la energía de las irregularidades del terreno, ballestas o barras de torsión; y otro que disipa dicha energía de forma controlada, el amortiguador.
Lo que, normalmente ocurre en todos nuestros vehículos es un desgaste por el envejecimiento progresivo de los amortiguadores. Cuando los amortiguadores están gastados el coche tenderá a botar más ante los desniveles del terreno, lo que convierte a nuestro vehículo en una enorme pelota de tenis difícil de mantener en contacto con la vía. Al ser progresivo este desgaste, el conductor se va acostumbrando a esa ‘nueva’ conducción, lo que hace que no se note, en principio, un gran cambio.
Por este motivo es importante mantener tu sistema de suspensión en perfectas condiciones, debes revisarlo en tu taller Nubecar de confianza año tras año. Además de esto, te vamos a dar algunos consejos para que, a la hora de conducir, tu amortiguación no sufra demasiado:
Después de conocer mucho más sobre el sistema de suspensión te recomendamos que sigas un mantenimiento responsable y seguro del mismo, por ello te animamos a visitar tu taller Nubecar de confianza. Allí nuestros mejores especialistas pondrán a punto cualquier fallo que pueda haber en el amortiguador de tu coche. Podrás disfrutar tranquilo y sin preocupaciones de tu vehículo si pides cita en tu taller Nubecar más cercano. ¡No lo dudes más!
